Cómo ahorrar energía con la calefacción encendida

Ahorrar energía en calefacción no consiste únicamente en recortar el número de horas que se utiliza el servicio, sino en hacerlo de una manera eficaz y eficiente. Muchas veces, hay pequeños actos de los que no somos conscientes, con los que vamos aumentando el consumo en calefacción sin que nos aporte otros beneficios.

Un buen ejemplo es el modo en el que se airea la vivienda,  todos los expertos están de acuerdo en que unos minutos son suficientes para que el aire se renueve. Tener las ventanas de casa abiertas durante horas solo hará que el hogar se enfríe y consuma más energía para calentarlo, además, esto no va a hacer que tengamos menos olores o mejor calidad de aire respirable.

En el post de hoy te ofrecemos pequeños trucos para ahorrar que seguramente encuentres muy útiles.

Realiza un buen mantenimiento de tus radiadores y caldera

Si tienes radiadores que necesitan ser limpiados no olvides hacerlo antes de poner en marcha la calefacción por primera vez, lo mismo te sucederá con la caldera, debes tener a punto todas las revisiones. Debido a que, pequeños fallos en la caldera o un mantenimiento deficiente, pueden hacer que el aumento en el consumo sea alto. Por eso, compensa pagar un seguro que incluya una revisión o directamente una revisión por tu cuenta.

Asesórate bien sobre dónde debes colocar los radiadores, de este modo el  calor se distribuye uniformemente en la habitación, también debes evitar cubrirlos con muebles, ya que si los tapas se perderá calor. Tampoco es aconsejable poner la ropa a secar ante el radiador, aumenta la humedad en la habitación y se incrementa la sensación de frío.

Evita superar los 21 grados de día o los 17 grados de la noche

En casa tiene siempre debe haber una temperatura cómoda, esto no significa que debas estar en pantalón corto durante diciembre. Una temperatura de 21 grados te ayudará a sentirte cómodo durante el día, en cambio, por la noche lo más recomendable es que el máximo sean 17 grados. Si sigues con frío, utiliza la ropa de cama, perfecta para cubrir las necesidades de calor extra que pueda haber.

Cada grado extra puede elevar hasta un 7% el consumo de la calefacción, por eso debes ser razonable en su uso, otro de los beneficios, es que evitarás los cambios bruscos al salir al exterior.

Para ahorrar, también será importante que la casa se vaya calentando poco a poco. No debes poner una temperatura muy elevada para que se caliente antes, aunque te parezca un ahorro, derivado porque el tiempo de uso es menor, en realidad se consume más. Programa el encendido para que cuando llegues a casa tengas la temperatura deseada.

No calientes habitaciones que no utilizas

A veces hay habitaciones en la casa que no se usan, como un cuarto de invitados o un salón que utilizas en ocasiones determinadas. Evita calentarla a diario porque no es necesario y dejarás de consumir energía innecesaria. Así que, lo mejor será que apagues el sistema en este tipo de habitaciones para ahorrar.

El método consiste principalmente en no calentar habitaciones que no vayas a utilizar en absoluto, para evitar encender y apagar los radiadores según el momento del día. Ya que, con esta acción incrementarás el consumo y además, no alcanzarás una temperatura agradable.

Asegúrate de tener un buen aislamiento

Carecer de un buen aislamiento puede hacer que el mejor sistema de calefacción acabe resultando inútil. Por eso, te aconsejamos que antes de instalar la calefacción hay que comprobar que las ventanas cierran correctamente y tienen un buen sistema de aislamiento. De lo contrario, sería preferible cambiarlas aunque eso suponga esperar más para instalar la calefacción. Asegurate bien de lo que necesitas, ya que en algunos casos únicamente con el cambio de los burletes por otros más eficaces, tendrás el resultado que buscabas.

También es importante revisar las rendijas de las puertas, sobre todo las que dan a la calle, por ahí puede escapar mucho calor. Si crees que no es el momento para cambiar las puertas, puedes colocar bajopuertas que evitarán que el calor se escape.

No te olvides de aislar las cajas de las persianas, por las cuales también se escapa el calor. Existen diferentes sistemas para hacerlo, tanto de manera profesional como a través de pequeñas obras de bricolaje casero.

Compara las ofertas del mercado

No te olvides de comprar las ofertas del mercado, los precios varían bastante de unos distribuidores a otros. Además, puedes encontrar que una misma compañía energética te ofrezca distintas tarifas y puede que no todas te favorezcan por igual.

En Grupo Solivesa te asesoramos para que encuentres la mejor tarifa adaptada a ti y a tus necesidades, para que ahorres dinero en tu tarifa de luz o de gas y además, disfrutes de la calefacción en tu hogar sin que suponga un gasto extra.

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